Autorretrato con Traje de Terciopelo, 1926 Frida Kahlo

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Autorretrato con Traje de Terciopelo 1926 Frida Kahlo
  • Nombre: Autorretrato con Traje de Terciopelo
  • Fecha: 1926
  • Dimensiones físicas: 79,7 x 60cm
  • Tipo: Pintura
  • Técnica: Oleo sobre tela

Frida Kahlo, Autorretrato con Traje de Terciopelo

Esta ilustración, Autorretrato con Traje de Terciopelo, es uno de los anteriores retratos de Frida Kahlo. Este retrato implicó la agitación emocional por otra parte de mostrarse con sus otras ilustraciones. Esta ilustración la utilizó como banderilla de amor para recobrar el cariño de su amante. Comenzó a trabajar en esta ilustración a términos del verano de 1926, cuando su vinculación con Alejandro se estaba volviendo amarga porque él pensaba que ella era demasiado progresista. Ella le escribió misivas y le prometió que sería una mejor persona para merecerlo. Cuando terminó este retrato en septiembre de 1926 escribió una nota:

«Dentro de unos momentos el retrato estará en tu vivienda. Perdóname por enviártelo sin cerco. Te imploro que lo pongas en un paraje bajo adonde puedas verlo como si me estuvieras mirando».

Frida Kahlo

Explicación de Autorretrato con vestido de terciopelo de Frida Kahlo

En este autorretrato, Frida llevaba un vestido rojo trinque y parece una princesa en él. Se lo envió a Alejandro y esperaba que él la recordara. Esta pintura funcionó: seguidamente de que Alejandro recibió este resentimiento, volvieron a estar anexos. Pero se fue a Europa en marzo de 1927 porque sus padres no quieren que esté cerca de Frida. Ella escribió muchas metálicas seguidamente de que se separaron y en esas esquelas se candela a sí misma con su Autorretrato con un vestido de peluche, llamándolo «tu ‘Boticeli’. Escribió esto:» Alex, tu ‘Boticeli’ incluso se ha jugado en gran medida retraído, no obstante le tesoro que inclusive que regrese, ella debería ser la ‘profundamente dormida’; a pesar de esto ella siempre te recuerda». Y a los ápices meses de echarse en brazos que regresara a México, escribió la carta en antecedente a este retrato:» No te imaginas lo secreto que es esperarte, serenamente como en el espejo». Era notorio que Frida esperaba que su autorretrato tuviera el permiso misterioso que puede reponerse su aprecio.